El optimismo antropológico del que suele hacer gala José Luis Rodríguez Zapatero volvió a dispararse precipitadamente por los datos del primer semestre del año, que mostraban una mejora en la recaudación tributaria respecto de igual periodo de 2009. En el primer semestre del año, se invierte la tendencia negativa, por primera vez, desde que la recesión se apoderó de nuestra economía y la recaudación por ese concepto se incrementó un 10,4%. Esto es, de 66.237 millones de euros recaudados en el primer semestre de 2009, se pasó a recaudar 73.130 millones de euros en los seis primeros meses de 2010.
El presidente del Gobierno, ante estos datos, recuperó de nuevo la sonrisa que hacía ya tiempo que tenía congelada, pensando que esto es ya una señal evidente de que ha comenzado la ansiada recuperación económica. Y como es natural, piensa que la buena nueva es debida a las medidas adoptadas por su Gobierno. De ahí que, en su comparecencia para hacer balance de su ejecutoria durante los primeros siete meses del año, mostrara su euforia. “Estamos en la dirección adecuada –dijo- y sólo hace falta cumplir, cumplir y cumplir con las reformas”. Y seguro que más de uno pensará, como Rodríguez Zapatero, que eso de que se recauda menos subiendo los impuestos es un simple cuento de calleja.
El endurecimiento de los tipos fiscales dio origen a esta engañosa y provisional remontada de los ingresos logrados provisionalmente por las arcas públicas. Si analizamos detenidamente los datos, no es como para lanzar las campanas al vuelo, ya que los ingresos procedentes del IRPF han crecido un 3,6% porque se ha eliminado la deducción de los famosos 400 euros que dieron el triunfo a Zapatero en 2008, además del incremento al 19% del tipo aplicable a las rentas del capital. La recaudación por IVA durante este primer semestre del año supuso un 31,4% más que en el mismo período del año 2009.
El repunte de los ingresos por IVA sería importante y definitivo si no fuera debido a que los ciudadanos adelantaron sus compras para substraerse a la subida de tipos fiscales que entraban en vigor el 1 de julio. Se trata, por lo tanto, de un incremento puramente accidental que, lejos de consolidarse, se va a ir conjugando durante el segundo semestre del año y que incluso puede llegar a ser negativo. Ahí está, por ejemplo el desplome generalizado en la venta de coches durante el pasado mes de julio. Según fuentes del sector, el volumen de matriculaciones de vehículos durante dicho mes no pasó de las 83.000 unidades, con lo que tenemos un retroceso superior al 23% con respecto al mismo periodo de 2009.
Es cierto que con esta mejora de ingresos se ha logrado reducir temporalmente el déficit público en un 25% y, según Zapatero, consolidar la confianza de los mercados en España. El saldo negativo del Estado a finales de junio quedaba en 29.765 millones de euros frente a los 39.553 millones que mostraban las cuentas a finales del mismo mes del año 2009. Pero se trata de un alivio momentáneo del déficit público pues, en lo que resta del año los ingresos van a experimentar un retroceso notable, llegando incluso a registrar cuotas negativas. Aunque se tratara de una mejora definitiva de los ingresos no habría impacto alguno positivo en las cuentas del Estado, ya que el gasto público ha crecido un 3,6% durante la primera mitad del año. Y mientras el gasto público siga aumentando no hay posibilidad de estabilizar la cuenta de resultados al no lograr el necesario equilibrio entre ingresos y gastos.
A pesar de que José Luis Rodríguez Zapatero presente la mejor recaudación del primer semestre como un logro notable, aparecen ya los efectos perversos de la entrada en vigor de la subida del Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) decretada por el Gobierno. Aparte de la notable caída en la venta de automóviles, que ya vimos, nos encontramos que en el mes de julio han subido los precios todos aquellos artículos en los que el IVA juega un papel importante como son los alimentos y las bebidas no alcohólicas, el gas, la luz y el transporte público. Esto ha supuesto, según adelanta el Instituto Nacional de estadística, un repunte de la inflación en cuatro décimas durante el pasado mes de julio, situándola en el 1,9% interanual.
Se trata del mayor incremento del IPC desde noviembre de 2008. De no haber sido por la subida del IVA, la inflación no habría pasado del 1,5% registrada en junio. Y eso que hay muchos artículos en los que aún no se ha repercutido el IVA por culpa de la situación de debilidad en el consumo. De ahí que el impacto del IVA aún no se haya dejado sentir en toda su crudeza. De momento, donde más se ha hecho notar es en los precios regulados como es la energía eléctrica, el teléfono, el gas y los transportes públicos. Las subidas de precio, como consecuencia de la aplicación de los nuevos tipos del IVA, irán dando lugar a que la retracción del consumo sea cada vez más importante.
Barrillos de Las Arrimadas, 5 de agosto de 2010
José Luis Valladares Fernández
El presidente del Gobierno, ante estos datos, recuperó de nuevo la sonrisa que hacía ya tiempo que tenía congelada, pensando que esto es ya una señal evidente de que ha comenzado la ansiada recuperación económica. Y como es natural, piensa que la buena nueva es debida a las medidas adoptadas por su Gobierno. De ahí que, en su comparecencia para hacer balance de su ejecutoria durante los primeros siete meses del año, mostrara su euforia. “Estamos en la dirección adecuada –dijo- y sólo hace falta cumplir, cumplir y cumplir con las reformas”. Y seguro que más de uno pensará, como Rodríguez Zapatero, que eso de que se recauda menos subiendo los impuestos es un simple cuento de calleja.
El endurecimiento de los tipos fiscales dio origen a esta engañosa y provisional remontada de los ingresos logrados provisionalmente por las arcas públicas. Si analizamos detenidamente los datos, no es como para lanzar las campanas al vuelo, ya que los ingresos procedentes del IRPF han crecido un 3,6% porque se ha eliminado la deducción de los famosos 400 euros que dieron el triunfo a Zapatero en 2008, además del incremento al 19% del tipo aplicable a las rentas del capital. La recaudación por IVA durante este primer semestre del año supuso un 31,4% más que en el mismo período del año 2009.
El repunte de los ingresos por IVA sería importante y definitivo si no fuera debido a que los ciudadanos adelantaron sus compras para substraerse a la subida de tipos fiscales que entraban en vigor el 1 de julio. Se trata, por lo tanto, de un incremento puramente accidental que, lejos de consolidarse, se va a ir conjugando durante el segundo semestre del año y que incluso puede llegar a ser negativo. Ahí está, por ejemplo el desplome generalizado en la venta de coches durante el pasado mes de julio. Según fuentes del sector, el volumen de matriculaciones de vehículos durante dicho mes no pasó de las 83.000 unidades, con lo que tenemos un retroceso superior al 23% con respecto al mismo periodo de 2009.
Es cierto que con esta mejora de ingresos se ha logrado reducir temporalmente el déficit público en un 25% y, según Zapatero, consolidar la confianza de los mercados en España. El saldo negativo del Estado a finales de junio quedaba en 29.765 millones de euros frente a los 39.553 millones que mostraban las cuentas a finales del mismo mes del año 2009. Pero se trata de un alivio momentáneo del déficit público pues, en lo que resta del año los ingresos van a experimentar un retroceso notable, llegando incluso a registrar cuotas negativas. Aunque se tratara de una mejora definitiva de los ingresos no habría impacto alguno positivo en las cuentas del Estado, ya que el gasto público ha crecido un 3,6% durante la primera mitad del año. Y mientras el gasto público siga aumentando no hay posibilidad de estabilizar la cuenta de resultados al no lograr el necesario equilibrio entre ingresos y gastos.
A pesar de que José Luis Rodríguez Zapatero presente la mejor recaudación del primer semestre como un logro notable, aparecen ya los efectos perversos de la entrada en vigor de la subida del Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) decretada por el Gobierno. Aparte de la notable caída en la venta de automóviles, que ya vimos, nos encontramos que en el mes de julio han subido los precios todos aquellos artículos en los que el IVA juega un papel importante como son los alimentos y las bebidas no alcohólicas, el gas, la luz y el transporte público. Esto ha supuesto, según adelanta el Instituto Nacional de estadística, un repunte de la inflación en cuatro décimas durante el pasado mes de julio, situándola en el 1,9% interanual.
Se trata del mayor incremento del IPC desde noviembre de 2008. De no haber sido por la subida del IVA, la inflación no habría pasado del 1,5% registrada en junio. Y eso que hay muchos artículos en los que aún no se ha repercutido el IVA por culpa de la situación de debilidad en el consumo. De ahí que el impacto del IVA aún no se haya dejado sentir en toda su crudeza. De momento, donde más se ha hecho notar es en los precios regulados como es la energía eléctrica, el teléfono, el gas y los transportes públicos. Las subidas de precio, como consecuencia de la aplicación de los nuevos tipos del IVA, irán dando lugar a que la retracción del consumo sea cada vez más importante.
Barrillos de Las Arrimadas, 5 de agosto de 2010
José Luis Valladares Fernández
Claro que empieza a notarse,querido Jose Luis, con la caida del consumo, y más que va a notarse en cuanto cerremos el periodo estival y se retome la actividad cotidiana y normal.
ResponderEliminarNo sólo está afectando ya en la caida de sectores como el del automovil o el vestido y calzado, si no que comprobaremos sus efectos nocivos en todos los órdenes.
Hoy mismo, el inefable Pepiño nos amenaza con una nueva subida de impuestos, por que según este cráneo privilegiado,son muy bajos.
Hola José Luis, yo ya lo he notado en las facturas, ojalá supiera hablar idiomas porque ya no estaría aquí, no hay futuro ninguno, ainss quién lo iba a decir, en pleno siglo XXI y en retroceso total, un abrazo :))
ResponderEliminarLos efectos de la subida del IVA, querida Natalia, van a ser devastadores, para los ciudadanos de a pie y para las empresas. Clarto que no podemos esperar otra cosa de esta pandilla de ineptos que nos gobiernan.
ResponderEliminarUn abrazo
Lo malo es para los que ya somos entraditos en años, querida Vir. A los que no somos ya de ayerno, no nos quieren en ninguna parte. Los jóvenes aún podeís moveros.
ResponderEliminarun abrazo
pues ya ves, algunos no querían firmar en la mesa porque la propuesta en contra salía del PP, con su pan se lo coman y que sigan votando a Zejismundo y su banda..y encima sale el analfabeto funcional del conceto diciendo que pagamos poco, cuando todo el mundo sabe que soportamos una presión fiscal superior a la media (la OCDE acaba de reiterarlo) y con sueldos mucho más bajos que el resto de Europa
ResponderEliminarEstimado amigo anuncian más impuestos y ten encuenta que entrarás en el 2011 con subidas de precios de articulos y demás.
ResponderEliminarEl IVA se notaba antes púes con la subida imaginate como esta el panorama de esscandalo.
Pero esto no acabara aquí que vamos a peor y no lo digo yo.
Un abrazo cordial José Luis.
Así es, amiga Maribeluca. Pero pedirle al de los concetos que distinga entre presión fiscal y esfuerzo fiscal sería demasiado. Su cacumen no da para tanto
ResponderEliminarUn abrazo
Esa es la cruz que nos ha caido con esta gente, amigo E..P... Y así tendremos que llevarla, hasta que el pueblo se canse de aguantar.
ResponderEliminarUn abrazo