jueves, 28 de abril de 2011

LA CULPA ES DE JOSÉ MARÍA AZNAR

El pasado día 17 de abril, José Luis Rodríguez Zapatero acude a la Fiesta de la Rosa del PSE-EE, celebrada en Durango y aprovecha la ocasión para declararse inocente de la prolongada crisis económica que nos afecta. Llega incluso más lejos y declara solemnemente que él es una de las principales víctimas de la crisis, provocada, como no podía ser menos, por la derecha insolidaria, instrumentalizada por José María Aznar. En su mitin se refirió, como es lógico, al terrorismo de ETA y reprochó al Partido Popular el “doble discurso” que mantiene, según él, en materia antiterrorista. 

Pero el meollo de su discurso, la mayor parte del mismo, estuvo dedicado a la persistente crisis económica y a criticar duramente la irresponsabilidad y el comportamiento desleal del Partido Popular con respecto a la misma. Pues, según Zapatero, a pesar de que “dicen ser tan patriotas”,  han prestado muy “poca ayuda” al Gobierno para poner remedio a tan funesta situación. Y les pide que, al menos, sean valientes y proclamen “aquí y fuera de aquí” que la economía española tiene “fortaleza y solvencia” suficiente y que por lo tanto “va a salir adelante”.

Insiste Zapatero una y otra vez que hay “en juego muchas cosas importantes” para España, y la más importante es su solvencia en el mundo. Por eso, y apelando constantemente  al patriotismo de la derecha, les pide que luchen “por defender siempre el interés de España” y que se abstengan de "contribuir, desde fuera, como hacen algunos a perjudicar a España". Y continua con su estribillo: "A aquellos que tanto invocan a España, que hagan algo por España y que digan, aquí y fuera de aquí, que tenemos fortaleza, solvencia y que la economía española va a salir adelante". Él es el ejemplo viviente que, sin que nadie se lo reconozca,  está luchando sin desmayo en esta “dura crisis económica, financiera primero, y económica después”.

Muy claramente Zapatero elude toda responsabilidad y repite una y otra vez, que es una crisis de un sistema financiero “desregulado y sin reglas”, que nos vino de fuera. La causa remota viene determinada por la caída de Lethman Brothers, que precisamente “no cayó por culpa del PSOE”, y menos por su propia culpa,  aunque alguien quiera hacer ver lo contrario. Más directamente  esta “crisis tiene causas y nombres y apellidos” muy concretos, y hasta un modelo, “según el cual, lo mejor es no intervenir en la economía, ni vigilar, ni saber qué pasa". Según este modelo, dice Zapatero, todo queda en manos de los mercados. Y ese es precisamente el fallo.

Y este modelo económico que todo lo supedita a los mercados, continuó Zapatero, es un “modelo de derechas”, que fracasó estrepitosamente. Y por supuesto, ahora es el presidente del Gobierno y sus huestes los que tienen que mojarse y solucionar el problema. En esta frase lo deja meridianamente claro: "Ahora a la izquierda y al PSOE nos toca afrontar el reto, combatir la crisis y cambiar el modelo económico y hacer que España recupere crecimiento y empleo y una economía basada en la innovación, sostenible y no en la especulación, el ladrillo y el endeudamiento. Eso es lo que estamos haciendo y lo vamos a conseguir, sin ayudas o con ayudas". Lo malo es que ahora ya sabemos cual es ese nuevo modelo económico, diseñado por Zapatero y que servirá para recuperar el empleo. Se trata simplemente de la rehabilitación de  viviendas. Toda una brillante idea.

Tan preocupado está Rodríguez Zapatero por esconder su propia responsabilidad, que olvida algo muy elemental. Olvida que la crisis económica no afectó exclusivamente a España, ya que todos los países tuvieron que pasar por semejante calvario. Olvida igualmente que nosotros, en principio, estábamos mejor preparados, que muchos de los países de nuestro entorno,  para hacerla frente y minimizar sus consecuencias. Pues era de dominio público, -y Zapatero alguna vez presumió de ello- que crecíamos y que creábamos más puestos de trabajo que nadie. Y llegó la crisis y en pocos sitios hizo tanto daño como en España.

Creo que algo tendría que ver en el desarrollo de la crisis el comportamiento irresponsable de Zapatero y de todo su Gobierno. Mientras que, en casi toda Europa y fuera de Europa, comenzaron a tomar medidas ya en 2007 para hacer frente con garantías a la situación económica preocupante que se avecinaba, el presidente de nuestro Gobierno negaba la crisis y hasta se permitía el lujo de llamar “antipatriotas” a quienes avisaban de lo que se avecinaba y exigían que se tomaran medidas. Aún después  de reconocer la crisis y constatar la evolución tan preocupante que llevaba, siguió gastando dinero a lo loco y las pocas medidas que tomaba, o eran descafeinadas,  o incluso eran claramente perjudiciales. No quiso tomar ejemplo ni de la “fracasada” Merkel, ni del “nervioso” Sarkozy, y tanto Francia como Alemania están ya creciendo decididamente, mientras nosotros seguimos hundidos en el pozo.

Para completar el día, Rodríguez Zapatero busco el halago ante los asistentes a la Fiesta de la Rosa, y quiso colgarse unas medallas que francamente no se merece. Habla del Estado de Bienestar como si fuera algo inventado por él y que solamente él sabe garantizar. Afirma con todo descaro que,  a pesar de la crisis “tan profunda” que ha exigido “austeridad, recortes y medidas difíciles”, hemos sabido mantener incólume el Estado de Bienestar. Y continuó: "Lo hemos defendido, lo defenderemos y lo hemos ampliado", algo que nunca ha hecho el Partido Popular. Se olvida Zapatero, por lo que parece, de que fue él, y no otro,  el que realizó el mayor recorte social  de nuestra historia, el que se atrevió a recortar los salarios de los trabajadores públicos y a congelar las pensiones. Y son precisamente estos, los empleados públicos y los pensionistas, además de los parados, los que de verdad sufren en sus carnes un amplio deterioro en su propio Estado de Bienestar.

Y no podía terminar la fiesta sin cantarle las cuarenta a José María Aznar, de una manera desmedida.  Según Rodríguez Zapatero, es Aznar el máximo responsable de todos nuestros males actuales. "Como ex presidente del Gobierno no debe y no puede poner en cuestión medidas que han sido adoptadas con pleno respaldo del Parlamento". "Le pido que cuando esté fuera de España haga lo que todo español: hablar bien de España". Y sigue con sus aceradas invectivas contra el ex presidente del Gobierno: "Aznar, en sus declaración en la universidad de Columbia dijo varias cosas graves: que el Estado de bienestar no es sostenible. Lo dice él, que no hizo nada por él".  Los logros, eso si, son debidos exclusivamente a la política social del PSOE. Y termina diciendo: "De esta crisis debe quedar el recuerdo de que a pesar de ser tan profunda, hemos mantenido el Estado de bienestar”. 

Gijón, 22 de abril de 2011

José Luis Valladares Fernández

12 comentarios:

  1. Si miramos en cualquier pais de nuestro entorno, no hay un ejemplo parecido ni similar a la inquina, el odio bilioso y obsesivo que la izquierda siente por Aznar.

    No le perdonan ni los éxitos, ni la mayoría absoluta ni el haber heredado un pais sumido en la corrupción,el crimen y el saqueo y elevarlo a niveles de riqueza y prestigio jamás vistos en nuestra reciente historia.

    Recogió un pais hundido económicamente, con tasas de paro superiores al 20%,la Seguridad social quebrada,con un Ministerio del Interior en la cárcel, con un Gobierno empozoñado en la cal viva y el crimen de Estado, con un González,Mister X, despidiendo a su Ministro y al secretario de Estado en la puerta de la cárcel, con el Gobernador del Banco de España en prisión, el Director General de la Guardia Civil huido, etc,etc...

    Con esa "herencia" vivimos el periodo de mayor crecimiento económico y properidad de nuestra historia.

    El periodo de Aznar no resiste comparación con ninguno de su antecesores, ni por supuesto, con ese cáncer llamado Zapatero que aún padecemos a dia de hoy.

    Ese odio visceral lejos de cejar tras la salida de Aznar del poder, curiosamente ha ido en aumento.
    Es el reflejo cotidiano de las frustraciones de una izquierda anquilosada en el tiempo, incapaz de mirar al futuro y con la vista puesta en lo acaecido hace setenta años, removiendo el pasado para escarbar y hozar en el guerracivilismo y la confrontación.

    ResponderEliminar
  2. José Luis, aunque parecería no ser un tema importante para un brasileño que vive en Argentina, te aseguro que con tus textos aprendo mucho, como también me entero de las andanzas de esa raza tan especial que son los políticos.
    Un abrazo.
    Humberto.

    ResponderEliminar
  3. Yo creo, querida Natalia, que esa aversión que sienten los progres de esta izquierda que padecemos hacia Aznar, es ya una enfermedad crónica. Y es que todos ellos esperaban un fracaso estruendoso de Aznar, y fue solucionando uno tras otro todos los problemas que habían creado los de la izquierda.

    El recuerdo de las expresiones de Felipe González lo demuestran. Recuerdo cuando dijo en una reunión del Comite Federal del PSOE: ¿Os imaginais la estampa del del vigotillo por las cancillerias del mundo? Y como pensaba que fracasaría muy pronto, soltó tambien aquello de que habia sufrido una derrota dulce.

    Un abrazo

    ResponderEliminar
  4. Gracias Humberto Dib por tu comentario. Las andanzas de los políticos dan para mucho a la hora de hacer comentarios de la actualidad.

    Saludos cordiales desde España

    ResponderEliminar
  5. Gracias taio por tu visita a este blog.
    Yo hoy me he pasado por el tuyo y me he reido un buen rato con tus chistes.

    Saludos cordiales

    ResponderEliminar
  6. Mensagem interessante, muito instrutiva.

    Convido a visita ao meu blog.

    http://discipulodecristo7.blogspot.com/

    Paz Seja Contigo!

    ResponderEliminar
  7. Zapatero tiene razón.

    ResponderEliminar
  8. Muchas gracias, J.C de Araujo Jorge, por tu visita a este blog. Yo haré lo propio con el tuyo, que considero muy importante.
    Saludos cordiales

    ResponderEliminar
  9. Las razones de Zapatero, amingo Anónimo, son los 5 millones de parados. Y que estaba en lo cierto Zapatero, se vió cuando empezaron las colas en las oficinas del paro. Y ahora ya, esas colas, sin disminuir ante las oficinas del paro, se han trasladado a las puertas de los comedores de Cáritas y empieza a haberlas para rebuscar en los contenedores de basura que están cerca de los grandes supermercados.

    Saludos cordiales

    ResponderEliminar
  10. Ese odio visceral lo tiene la izquierda como método sistemático para mantenerse en el machito. Y a fé mía que lo hace pero que muy bien.
    El problema es que la derecha (que tiene un miedo cerval a reconocer que es la derecha), no sabe contestar, con educación pero duramente y sin complejos.
    Porque, de lo que no se dan cuenta nuestros medrosos arriolano-marianiles, es que vale más una vez amarillo que cien coloraos.
    Que una vez pierdes el miedo, les has quitado su ventaja. Que el cobarde muere cien veces.
    Todos sabemos que ser de derechas, o liberal, no es que no sea sinónimo de mala gente, sino de todo lo contrario. Y mientras el PP siga con ese miedo, los sociatas, maestros del marketing, lo aprovecharán.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  11. En eso de atribuirse bondades, amigo CAPITAN TRUENO, son verdaderos maestros los prohombres del socialismo. Todo lo bueno lo han hecho ellos y lo que va mal, es debido a la derecha. Por ejemplo el Bienestar Social, lo crearon ellos y lo mejoran cada vez que están en el Poder. La derecha lo deteriora cada vez que llega al Gobierno. ¿Será que el paro es la expresión suma del Bienestar Social?. Porque en realidad es lo que hacen cada vez que llegan al Gobierno.
    Y la derecha a doblar la cerviz. Para que no les tilden de "derechas", se callan como muertos, dejando el campo libre a esa izquierda ultramontana.
    Saludos cordiales

    ResponderEliminar