En la
mitología griega, nos encontramos con dos ancianos, Filemón y Baucis, que
llevaban viviendo juntos muchos años en
las montañas del antiguo país de Frigia. Su hogar era una humilde cabaña y
tenían muy pocas propiedades. Pero como no ambicionaban nada más y soportaban
con buen ánimo su suerte, se consideraban suficientemente ricos y afortunados.
Por lo tanto, aunque llevaban una vida marcada por la sencillez, vivían
dignamente y nadie era más feliz que ellos
Un buen día Zeus y su hijo Hermes bajaron del
Olimpo y, adoptando la figura humana, fueron a Frigia para probar la
generosidad y la hospitalidad de los hombres de aquella tierra. Como si fueran
dos viajeros sumamente cansados, fueron de puerta en puerta, pidiendo un lugar
para pasar la noche y, así, poder
descansar y reparar fuerzas. Pero las familias de aquella región eran tan egoístas que, sin
escuchar sus ruegos, cerraban sus puertas, no hallando cobijo en ninguna parte.
Llegaron
por fin a la última cabaña, que era la vivienda de Filemón y Baucis. Aquí, los
amables ancianos, les dejaron entrar y les
agasajaron debidamente con lo mejor que tenían para comer y se
desvivieron para que se sintieran cómodos en su modesta casa. Por el buen trato
recibido, Zeus y Hermes comunicaron a sus anfitriones la inminente destrucción de la ciudad de Frigia y de todos
aquellos que les habían negado la entrada. Pidieron a Filemón y a Baucis que
subieran con ellos a lo más alto de la montaña. Desde allí contemplaron absortos cómo era
destruida toda aquella región por una inundación provocada por Zeus.
Ambos
ancianos comprobaron con satisfacción que se había salvado su cabaña, y que fue
convertida posteriormente en templo. Y cuando Zeus se comprometió a concederles
un deseo, le pidieron ser guardianes de su nuevo templo y permanecer unidos
para siempre. Y así fue. Custodiaron el templo y ejercieron de sacerdotes
durante muchos años y cuando aparecieron
las Moiras o parcas con sus hilos, fueron convertidos al mismo tiempo, Filemón
en frondosa encina y Baucis en un esbelto tilo.
Piensa Alfredo
Pérez Rubalcaba que puede presumir de ser tan caritativo y humanitario como el
viejo Filemón de la leyenda; que, en el mundo actual de la política, no hay nadie que le iguale en bondad y
desprendimiento. Para Rubalcaba, los responsables del Partido Popular son todos
como los vecinos de la feliz pareja mitológica, duros de corazón,
extremadamente egoístas e insolidarios, y que, si se les deja, terminan hasta
con el Estado de Bienestar. Obligan a los trabajadores, a los menesterosos y a
los más débiles a seguir la dura ruta del calvario y, sin embargo, favorecen
descaradamente a los ricos y a los banqueros.
Que
Rubalcaba asume el papel de Filemón es evidente. Ahí está para demostrarlo el
discurso pronunciado ante el Comité Federal del PSOE el `pasado 18 de enero.
Critica duramente al Partido Popular por la proyectada reforma de la ley de
Interrupción Voluntaria del Embarazo. Para el secretario general de los
socialistas españoles, el Gobierno reforma esta ley para "reconciliarse"
con los sectores más radicales de la derecha española. La ultraderecha
española, insiste Rubalcaba, carece de espacio político propio, porque "o
están o votan" al Partido Popular. Y esto ha sido determinante para que el
Ejecutivo de Mariano Rajoy aprobara unilateralmente esta reforma.
Según el
líder de los socialistas españoles, el Partido Popular está claramente
mediatizado por un "Tea Party"
similar al del Partido Republicano de EEUU, motivo más que suficiente para que
el Gobierno cercene despóticamente "los derechos de las mujeres”. Para no
airar a esa ultraderecha española y seguir contando con sus votos, Mariano
Rajoy sustituyó el modelo de plazos que rige en la actual ley del aborto por el
modelo de supuestos, impidiendo así que sea la mujer la que decida
responsablemente sobre su maternidad.
En su
discurso ante el Comité Federal del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, además del tema
del aborto, utilizó otras banderas para atacar y desprestigiar al Partido
Popular. Una de ellas, la economía. Comienza diciendo que, mientras Europa no apueste decididamente por el crecimiento y
el empleo, no habrá recuperación económica en España. Y eso es labor de la
izquierda, porque la derecha no hace más que imponer ajustes, que es lo
contrario de lo que necesitamos en España para salir de esta crisis. Y
recomienda a los suyos que expliquen a los españoles “una y otra vez”, que “no
es Europa la que recorta, sino la derecha europea”.
Es
normal y totalmente comprensible que pida a sus huestes que se empleen a fondo
en las próximas elecciones europeas y que apuesten resueltamente por alguien de
la izquierda para presidir la Comisión Europea. Pero que diga que "a
España le interesa la izquierda en la Comisión y el Parlamento europeos"
para lograr así la plena recuperación de nuestra economía, es francamente un
acto de cinismo imperdonable. Es insultante e indecente que Rubalcaba insinúe
ahora que no saldremos de la crisis mientras
no tengamos un Gobierno socialista. La experiencia no ha podido ser más cruda y
terrorífica, y nos dice exactamente lo
contrario. El último Gobierno socialista, por ejemplo, nada menos que con
Rubalcaba en la vicepresidencia del mismo, dejó a España al borde de la quiebra
económica y con las arcas públicas hasta sin telarañas
Pero el
actual secretario general del PSOE no se pone colorado por nada y sigue
anatematizando desvergonzadamente la política y las reformas emprendidas por el Partido Popular. Para Rubalcaba, la
reforma laboral es “lo más dañino” que ha hecho el Ejecutivo de Mariano Rajoy, y
promete, faltaría más, derogarla tan pronto como tenga responsabilidades de
Gobierno. Al Partido Popular le niega hasta el pan y la sal e insiste una y
otra vez que el Gobierno de Mariano Rajoy no tiene ni arte ni parte en la recuperación
económica que se adivina y en la caída de la prima de riesgo. Según el líder de
los socialistas españoles, esta sensible mejora es debida a las medidas adoptadas últimamente por el Banco Central Europeo y, cómo no, a la
izquierda, que al ganar las elecciones en varios países, ha empezado a influir
bastante más en el Parlamento Europeo. Y esa recuperación económica no será
completa hasta que no se dé la vuelta a todo lo que “se ha cargado” el Partido
Popular.
Pero los
socialistas, afirma Rubalcaba, no descansarán mientras no se recupere el empleo
con todos sus derechos, mientras no volvamos a disponer de una sanidad pública
magnífica y de una educación pública de calidad. “Se trata, en definitiva, de
recuperar lo que se ha cargado este Gobierno que es la igualdad”. No podemos
esperar a las próximas elecciones para cambiar “el modelo de salida de la
crisis de la derecha”, que consiste obviamente en “menos derechos, menos
salarios (y) menos pensiones”. Y acude al Evangelio de San Mateo para decir,
sin sonrojo alguno, que van “a dar a
cada cual lo suyo. A Draghi la bajada de la prima de riesgo y a Rajoy las
bajadas de los salarios y de las pensiones”.
Y Rubalcaba,
tratando de ser lo más persuasivo posible y sin abandonar la contundencia, pide
a los miembros del Comité Federal del PSOE a que trabajen incansablemente para
recuperar la igualdad y todas las demás
cosas que hemos perdido por la nefasta actuación del Ejecutivo de Mariano
Rajoy. Tenemos, dijo, que “utilizar todos nuestros medios para parar a la
derecha. No vamos a esperar a las próximas elecciones para hacerlo". Y todos sabemos qué medios son esos: el acoso, las
algaradas y los alborotos callejeros. Y colmo “la violencia es la partera de la
Historia”, según dijo Carlos Marx, la izquierda española siempre ha hecho lo
mismo: ocupar la calle, con violencia si hace falta, para ganar de esa manera
lo que perdió en las urnas.
Si en
las elecciones generales de noviembre de 2011 hubiera ganado Rubalcaba, los
socialistas ocuparían ahora las instituciones y tendríamos asegurada la paz en
las calles, pero los españoles habríamos perdido bastante más que con Mariano
Rajoy. La política del PSOE nos hubiera llevado necesariamente al rescate total
de España y, en consecuencia, a la intervención de las facultades económicas
del Gobierno. Y como ni la Comisión Europea, ni el Fondo Monetario
Internacional, ni el Banco Central Europeo son entidades caritativas y ni
tienen como objetivo el bienestar de los ciudadanos rescatados, habrían tomado,
sin contemplación alguna, las medidas necesarias para equilibrar los
presupuestos públicos de la única manera que es posible: reduciendo
drásticamente el gasto público y aumentando los ingresos.
En los
países que han sido totalmente rescatados, como Grecia, Irlanda y Portugal, la
reducción de salarios soportada por los empleados públicos ha sido brutal. Y
además de perder todas sus pagas extras,
fueron despedidos muchos de ellos, incluidos funcionarios. Los jubilados
corrieron la misma suerte, ya que, en vez de ser congeladas sus pensiones,
fueron duramente recortadas. En esos países se redujeron otras muchas partidas,
como las prestaciones destinadas a los desempleados, a las inversiones
públicas. Por otra parte, se
encarecieron notablemente las tasas y los distintos impuestos y pagos
relacionados.
España
hubiera corrido la misma suerte que los países rescatados y hasta es muy
posible que los incrementos del IVA o
IRPF tan elevados que ya soportamos,
hubieran sido insuficientes. El paro, que ya es extremadamente alto,
aumentaría aún más y tendríamos un menor crecimiento. Esto, a la vez que acarrearía
mayor sufrimiento a un buen número de ciudadanos españoles, mermaría
lamentablemente nuestra capacidad para generar ingresos durante muchos años.
Pero a
Rubalcaba le preocupa muy poco todo esto. Espera, eso sí, correr la misma
suerte que Filemón, que algún dios baje
del Olimpo y destruya a todos sus enemigos y lo eternice en el poder.
Gijón,
20 de enero de 2014
José
Luis Valladares Fernández
Esas bandas de rojos que nos asolan, comunistas y socialistas deberían marchar a la tierra prometida, Cuba y Venezuela.
ResponderEliminarUn abrazo,
Seguro que, entonces, abandonaban su militancia.
EliminarUn abrazo
El PSOE y su actual lider, tienen un problema.
ResponderEliminarPor más que las encuentas anuncian que el PP se está dejando votos por el camino, algo lógico, por un lado el desgaste propio de gobernar y, por otro, el descontento con algunas de sus medidas o con su negación de lo evidente, pero es que el PSOE, no sólo no recoge ni uno sólo de esos votos, sino que va en caída libre.
Eso se debe a que, los que dirigen ahora el PSOE, son reaccionarios al máximo. Parecen los socialistas de los años 30.Debieran copiar de los socialistas alemanes o incluso franceses
EliminarHola, José Luís:
ResponderEliminarBuena lección. ¡Menuda si hubiesen ganado los socialistas en 2011, con el país en el tobogán de destrucción de la economía y la sanidad! Seguramente que, como apuntas, tendrían que habernos rescatados.
Pero con el abandono por el PP de su programa electoral parece que las cosas no han mejorado, presionadas las clases medias por sus recortes, obligadas a una mayor contribución y con un panorama terrible de desempleo y juventud sin futuro.
Con Rubalcava las cosas irían todavía peor. De eso no hay duda. Triste que carezcan de argumentos más allá del insulto al Gobierno o de la promoción del aborto. O de la agresión a la Iglesia. Son chusma. Peste.
Un abrazo
Seguro que, a estas alturas, nos habrían rescatado y estaríamos como los griegos. Claro que Rajoy, aunque ha cortado esto, ha perdido una buena oportunidad de cubrirse de gloria.
EliminarHabría cambiado notablemente el ambiente económico, si hubiera cumplido con su programa electoral, que fue para lo que le votaron ampliamente los ciudadanos españoles.
Un abrazo
No pueden dar lecciones de nada los que por dos veces han dejado en la ruina económica y moral a España y menos este individuo que ha estado en todos los tejemanejes en ambas ocasiones, incluso en los episodios más oscuros; claro que, otra parte, los candidatos "novicios" que presentan como posibles relevos pueden ser aún peor que el mismo Galfredo en bastantes sentidos porque son de la escuela zapateresca, susto o muerte...
ResponderEliminarUna experiencia como la que tuvimos con ZP ya es más que suficiente. Por Dios, que no vuelvan mequetrefes así.
EliminarEl problema que tienen principalmente es el RBCB-GAL, su corrupción, la hipocresía,.....etc....Pero como todos, aquí el que no corre vuela, PP, I.U, PP, VOX, CCOO, UGT...etc.
ResponderEliminarQue ganará el PP, seguro, pero no por buenos, el miedo reina en el ambiente, con unas tragaderas que el mundo flipa con nosotros.
Los fantasmas los tienen toda la casta y se lo mantenemos nosotros a todo lujo.
A mi me daría vergüenza votar a mafiosos, corruptos, chapuceros y demás morrallas que nos ponen en las listas sin poder votar realmente al que tu quieres votar...vergüenza da desde que se creo la mafiocracia que nunca ha habido listas limpias.
Esto es un país de locos ignorantes haciendo estupideces unas tras otra.
Esta sociedad está hace tiempo condenada, rodeada de buitres y de tigres que van de vegetarianos.
Seguimos siendo rojos o fascista, como si esto fuera el 36, una izquierda tan podrida como el fascismo actual de la derecha.
¿Que partido político de lo que han gobernado en este país a cumplido con su programa por el cual se les voto? ninguno, todos han echo los que le han venido en gana, sumando a los partidos que han gobernado las autonomías, todos morrallas, han arruinado todo halla donde han gestionado.
Seamos honestos esto es una put^` Mier**, mande quien mande van a seguir faltando el respeto
y seguirán vacilandonos.
Lo del PP madre mia, queda poco para cantar el car al sol que asco por Dios de fascismo pepero.
Si Olof Palme viviera y fuera de este país mi voto lo tendría seguro como el de millones ciudadanos, a no coñ* que España por naturaleza es fascista y de izquierda con morralla.
Saludos cordiales J.L.V.F.
Tienes más razón que un santo, pero no nos dan opción. Esperemos que algún día despierten y vuelvan a un camino más satisfactorio para todos
Eliminar.
Filemón y Baucis son el ejemplo de la solidaridad, que siempre debe ser desinteresada.
ResponderEliminarPero en este país de corruptos, nuestros políticos, ya desclasados por el interés común, serían arrasados por el rayo de Zeus y destituídos por el mensajero Hermes, volando con sus sandalias aladas, como los guardias civiles que llevaban la destitución de un cargo público, en sus motos, en el régimen anterior.
No ha cambiado nada desde la época anterior a la "democracia", todo sigue igual con un lavado de cara para que nada cambie y sigamos bajo la dictadura de una grey preñada de privilegios, mientras nos sentimos libres por votar en una urna amañada con candidatos previamente elegidos por los partidos, cada vez más fuertes en su osadía y corrupción, mientras tragamos sapos y culebras creyéndonos soberanos.
La política mundial, y los políticos de todos los países, solamente obedecen las consignas del viejísimo orden mundial: la supremacía de unos ricos, que medran en la riqueza, mientras recortan la vida económica de los países que pretenden una justicia social; que son enajenados por las multinacionales para un consumo innecesario y compulsivo, con conferencia de Kioto que se la pasan por el forro, en una pseudoescalada tecnológica que no podemos asumir los ciudadanos corrientes, sin sentir el vértigo y hastío de una imposición dictatorial de las empresas.
Nuestros políticos también son así, como las empresas que solamente viven de los beneficios; son empresarios ganaderos que dirigen un ganado, de oriente a occidente y de norte a sur, con el ordeño continuo y con "a rapa das vestas nas urnas" en épocas señaladas, para seguir en la cresta de su ola de depredación. No hay ninguna diferencia entre las PES (capullo o gaviota); EL MÁXIMO DENOMINADOR COMÚN ES EL MISMO: EL PODER.
Te he dejado un mensaje en mi casa.
Un saludo.
En vez de mejorar con el cambio de sistema, yo creo que hemos empeorado. Ahora no hay más que espabilados viviendo del cuento y tratan de sacarnos dinero de todas partes. Los que peinamos canas y vivíamos de un sueldo,no estábamos sujetos al IRPF. De donde sacaban el dinero, no lo se, pero a los que vivíamos de un sueldo, nunca nos pidieron dinero
EliminarSaludos cordiales