lunes, 23 de febrero de 2015

AMENAZA DE TRAGEDIA CARIBEÑA


En una leyenda mitológica de la antigua Grecia se narra la vida de Paris (Πάρις), el más famoso de los pastores frigios, que participó en los juegos públicos de Troya y venció a todos sus rivales. Sus extraordinarias hazañas fueron ampliamente conocidas entre los dioses olímpicos. Y estos, teniendo en cuenta su celebridad y aplomo, deciden nombrarle árbitro para poner fin al continuo debate que se estaba librando en el Olimpo.

Es entonces cuando se celebran las bodas de Tetis y Peleo y fueron invitados todos los dioses y las diosas.  Pero fue excluida de la fiesta, la diosa Eris porque, dado su carácter problemático, había miedo fundado a que sembrara el desorden y la desavenencia entre el resto de comensales. Esta exclusión del festín nupcial sentó muy mal a la diosa Eris y decide vengarse cumplidamente de esa afrenta imperdonable. Así que, al final de la comida, aparece en la fiesta envuelta en una nube y arroja sobra la mesa una manzana dorada con esta lacónica inscripción: a la más hermosa. Y Afrodita, Hera y Atenea comienzan a reñir entre sí, porque las tres creían tener derecho a esa manzana.

Entonces  Hermes, por encargo de Zeus, llama a Paris, el príncipe de Troya, para que actúe de juez y diga cuál de las tres diosas es la más bella. Y como las tres querían alzarse con el triunfo, cada una de ellas elaboró meticulosamente sus tretas y ofertas particulares para contar con el favor de Paris en la elección. Hera, la esposa de Zeus, le tentó, ofreciéndole poder político y riquezas, Atenea trato de sobornarle prometiéndole la gloria de las armas y Afrodita se comprometió a entregarle a la mujer más hermosa de la tierra, que era Helena, la esposa de Menelao, el legendario rey de la Esparta micénica. Como era de esperar, Paris acepta la oferta de Afrodita  Es por tanto esta diosa la que se lleva la manzana dorada y la que cumple posteriormente su palabra, ayudando a Paris a raptar a Helena, provocando así la famosa Guerra de Troya.

Algo parecido puede ocurrir en España con Podemos, si IU y los responsables de los dos partidos políticos mayoritarios no cambian radicalmente su discurso y su estilo y, cómo no, la manera de afrontar los problemas que afectan a la sociedad española. Hablan con demasiada frecuencia, es cierto,  de honestidad y limpieza y,  por supuesto, de regeneración democrática, pero sin convencer a nadie. Los ciudadanos ya no les hacen caso, porque no son precisamente un ejemplo claro de transparencia, y porque han sido, de manera real o aparente, demasiado tolerantes con los chorizos, con los que trincan y con los que abusan descaradamente de sus responsabilidades políticas.

Hay demasiados políticos profesionales que, por su comportamiento claramente desleal y sospechoso, han perdido toda su credibilidad y están totalmente deslegitimizados para gestionar los asuntos públicos. Son tan desaprensivos, que anteponen siempre sus intereses particulares al bien común de los españoles. Y claro está, para los que no tienen nada que ver con la política y viven honradamente de su trabajo o de su pensión, todos los políticos son iguales, no hacen distinciones entre los que son honestos, que los hay, y los vividores y gorrones que, en realidad, son los que más ruido hacen y los que más se ven.


También hay que tener en cuenta que, por decisión política, han sido las clases medias las que han cargado con todo el peso de la recuperación económica. Los políticos, en cambio, no han perdido ninguna de sus cuantiosas gangas y prebendas. Ante semejante situación discriminatoria, es normal que se sientan gravemente perjudicados todos los integrantes de esas clases medias, incluidos, faltaría más, los pensionistas y los parados que tienen verdaderas dificultades para llegar a final de mes. De ahí que crezca la indignación contra esos políticos desaprensivos, los odien y hasta sientan, cómo no,  ganas de vengarse de ellos.

Los grandes partidos políticos están muy equivocados, si piensan que el rechazo de los ciudadanos es pasajero y que terminará cuando hayamos superado definitivamente la grave crisis económica que nos afecta Si sus responsables políticos no abandonan esa especie de autismo suicida y su arrogancia, que les impide ver el enfado generalizado de media España, si no cambian de estrategia y comienzan a ser inflexibles con los corruptos, el enfado y la indignación ciudadana seguirá creciendo de manera imparable. A estas alturas de la película ya no sirven en absoluto esos simples cambios cosméticos a  que nos tienen acostumbrados.

Y si crece aún más el número de indignados, llegarán a tener auténtico poder de decisión y, al igual que Paris en el Olimpo, terminarán constituyéndose en árbitros de nuestra situación política. Y en ese caso, nos enfrentaríamos inevitablemente a una nueva tragedia, esta vez de tipo  caribeño. Podemos lleva tiempo utilizando dialécticamente el hartazgo de los ciudadanos para ganarse al  electorado español.  Si lo consiguen, de entrada, dinamitarían nuestra Constitución y nuestro sistema de libertades y, después, nos impondrán, con toda seguridad, una democracia de corte netamente popular. Si limitarán a copiar, sin más, el sistema bolivariano impuesto por Hugo Chávez en Venezuela.

Los líderes de Podemos irrumpieron en la escena política española con un discurso claramente maximalista, anunciando sin tapujo alguno que van a por todas, que van a arrasar y a desmontar hasta los cimientos mismos del  sistema político actual, instaurado fraudulentamente por la Transición. Imitando el estilo del ‘gorila rojo’, se presentan como el  azote de la casta corrupta, manejada por los insaciables bancos y el capital. Presumen de haber sido consejeros áulicos de  Chávez, cuando en realidad han sido políticamente utilizados, que no es lo mismo, para trasplantar a España el chavismo más absurdo y trasnochado.

Los responsables de Podemos hablan de España como si fuera un territorio comanche que necesita ser reconquistado. Y ellos, que parecen más bien una banda de farsantes, se presentan, faltaría más, como si fueran auténticos mesías, dispuestos a sacrificarse voluntariamente para redimir a todos los españoles y ofrecerles un nuevo amanecer sin banqueros y sin capitalistas. Y aunque los crucifiquen, van a defender sin desmayo a los del pueblo, “a los de abajo”, para que triunfen sobre “los de arriba”, según expresión de Pablo Manuel Iglesias, el secretario general de Podemos.

Y desde un principió, utilizaron desvergonzadamente las aulas de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociología de la Complutense para poner aquí la primera piedra del régimen chavista. Más que a enseñar, se dedicaban casi exclusivamente al adoctrinamiento de los alumnos. Sus sermones y sus diatribas contra la  “casta política” y las “cúpulas podridas” de  las instituciones públicas subieron de tono con la creación de Podemos. Comenzaron a menudear sus invectivas contra lo que ellos llamaban el club de “los ricos”, a los que culpaban de todos los males que afligían a las gentes sencillas, que son “los nuestros”. y abogaban claramente por la destrucción de la democracia y la economía para seguir pasa a paso la filosofía bolivariana.

Gracias a su audacia, y a un desmedido apoyo mediático, han  conseguido instrumentalizar a su favor el enorme enfado social, generado a partes iguales por la crisis económica que hemos padecido, por la corrupción institucionalizada y, cómo no, por la torpeza de algunos responsables de otros partidos políticos. Pero advirtieron  muy pronto que les estaba perjudicando gravemente su postura rupturista y anti sistema y mostrarse partidario del régimen chavista. La conclusión era meridianamente clara, o cambiaban de discurso, o no tendrían más adeptos que los indignados, excluyendo así a otros muchos posibles votantes.

Para sortear semejante problema, la cúpula de podemos adopta  la postura del camaleón y modera  su lenguaje, excesivamente belicista y un tanto tabernario. Se esfuerzan inútilmente por hacernos creer que se identifican de manera total con la socialdemocracia nórdica, concretamente la danesa. Y hasta se enfadan cuando algún medio de comunicación les identifica con la izquierda y mucho más, claro está, si les relaciona con la extrema izquierda. Quieren que la sociedad española olvide de una vez su innegable vinculación con el chavismo.

Pero los lazos de la casta universitaria de Somosaguas con el régimen venezolano, por mucho que lo nieguen, son cada vez más evidentes y mucho más preocupantes. Por si quedaba alguna duda, viene el presidente del Parlamento de Venezuela, Diosdado Cabello,  y equipara a Podemos y a Syriza con el movimiento creado por Hugo Chávez que, en el caso de España, llegará “más pronto que tarde”. Y agrega a continuación: “eso es el chavismo que anda dando la vuelta al mundo entero”. El régimen chavista subvenciona generosamente a Podemos para ayudarle a triunfar, porque sabe que así tiene asegurada en España una plataforma de difusión por toda Europa. Esperemos que los ciudadanos españoles sepan lo que hacen a la hora de votar.

Gijón, 14 de febrero de 2015

José Luis Valladares Fernández



12 comentarios:

  1. Yo también confío en la inteligencia mayoritaria de los votantes españoles, aunque los grandes partidos no lo ponen fácil y merecen un escarmiento de una vez por todas, pero espero que sea de otro tipo que echarse en brazos de esta gente.

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    1. Esperemos que quede todo en una mera preocupación, que no llegue a concretarse nunca.. Que copien sistemas adelantados, que nos den satisfacciones, bien. Pero tratar de importar un sistema que genera miseria y pobreza, me parece absurdo

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  2. El problema es que en España es legión los ciegos, los que no se dan cuenta que esta banda nos llevan a un régimen imagen y semejanza al de el autobusero con CI casi plano, ese Maduro que está dejando al pueblo venezolano en la indigencia... exceptuando los de la casta, su casta, esa palabra tan usada por esos hijos del mayor criadero rojo, la Complutense de Carrillo hijo.

    Pero es un aviso a navegantes, la ingente cantidad de chorizos que se esconden en la política tendrían que devolver hasta el último céntimo robado aparte de pasar por el "hotel" a la sombra, pero no creo que los dirigentes de los dos grandes partidos estén por la labor, tienen mucho trapo sucio en sus huestes.

    Un abrazo.

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    1. Me parece un suicidio apoyar a una opción tan descabellada como el chavismo. Y hay cosas que no tienen vuelta atrás.

      Un abrazo

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  3. Vaya con Podemos,a ellos tambien se le ve el plumero.Aqui no se salva nadie de esta terrible metastasis que es la corrupcion,un abrazo,

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    1. Predican una cosa, pero hacen otra. Esperemos que la gente los ponga en su sitio. Un abrazo

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  4. Pues menudo arreglo ¿no? confiemos en que se imponga el sentido común que hace menos ruido que lo que se ve...

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    1. El problema es que hay mucho mastuerzo. No se enteran que ellos mismos sde meten en la boca del lobo,

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  5. Hola, José Luís:

    La conexión "bolivariana" parece muy clara, así como la correspondiente financiación. Al ver la política del irracional Maduro y el consiguiente manto de miseria que hoy anega Venezuela, hay que prepararse para lo peor. Vemos que, además, aunque las encuestas presentaban ya un Pablo Iglesias a la baja, de repente surge Tele5 con una entrevista de Pedro Piqueras que nos ha mostrado a un Iglesias seguro de su discurso. Evidentemente, pocos partidos han tenido un apoyo mediático como el que se le da a Podemos, con el inri de que este partido pretende la nacionalización de todas las teles. No se entiende que se les aúpe tanto.

    Un abrazo

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    1. Lo malo es que nadie escarmienta en cabeza ajena. En cuanto a Piqueras, que le conozco desde hace mucho, va siempre con los de la feria y vuelve con los del mercado.. Alucinante.

      Un abrazo

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    1. Esperemos. Pero como lleguen, no se les echa después ni con agua hirviendo.

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