El pasado día 5 de septiembre, en el escenario habitual de la campa de Rodiezmo (León), se celebró la consabida fiesta que organizan anualmente los mineros del SOMA-FIA-UGT. Aunque en la edición de este año, al faltar a la cita el Secretario General del PSOE y presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y varios de sus hooligans y compinches, la fiesta perdió claramente gran parte de la relevancia de otros años. Como esta vez no tenía nada que vender a sus huestes, Zapatero tuvo miedo a los abucheos y a la contestación de la otrora enfervorizada audiencia. Y en realidad, sobraban motivos para ello, dada la gestión de la crisis económica realizada por el Ejecutivo.
No sabemos cuál hubiera sido el desarrollo de los discursos de haber asistido al evento Rodríguez Zapatero. Su presencia, desde luego, hubiera sido más necesaria que otras veces, para defender ante los mineros los intereses de la industria nacional del carbón que peligra claramente su continuidad, con lo que esto supone para el empleo en la minería. Este año, el blanco prioritario de los discursos fue Alejo Vidal-Quadras por hablar a destiempo de algo que, al parecer, no es de su incumbencia. Todos sabemos que está en el aire un real decreto de nuestro Gobierno para primar el consumo de carbón autóctono en las centrales térmicas españolas. El Ejecutivo comunitarios aplazó hasta después del verano su decisión sobre el plan español de ayudas al carbón.
Es evidente que Vidal-Quadras eligió un mal momento para manifestar públicamente su postura ante el decreto de incentivos al carbón español, pendiente de la aprobación comunitaria. Llegó a pedir a Bruselas que examinara con lupa semejante decreto, sin tener en cuenta que su postura, improcedente o no, dañaría con seguridad las expectativas electorales en las regiones mineras. Como en el PSOE están siempre a la que salta, se olvidaron inmediatamente de sus propias miserias y de que el principal enemigo de las ayudas al carbón no es otro que el conocido socialista Joaquín Almunia, para lanzar todo tipo de diatribas contra Alejo Vidal-Quadras. Los oradores de Rodiezmo procuraron explotar al máximo la iniciativa de éste, para tildar seguidamente al Partido Popular de insolidario, ya que, según ellos, atenta “con sus planteamientos contra la viabilidad económica del sector y de las comarcas mineras”.
Fueron obviadas evidentemente las explicaciones posteriores de Alejo Vidal-Quadras, en las que indicaba que la minería del carbón debe recibir el oportuno apoyo de España, por los miles de empleos que proporciona en las cuencas mineras, pero ratificándose, claro está, en que el camino elegido por el Ejecutivo de Zapatero no era el más adecuado. Es cierto que el Gobierno, las mismas empresas y los sindicatos aún mantienen la esperanza de que la Unión Europea prorrogue el reglamento de ayudas al carbón al menos hasta el año 2020, por tratarse de un sector estratégico necesario para el futuro energético nacional. Pero la intención de Bruselas, defendida inequívocamente por Almunia, es muy clara: liquidar de manera inapelable todas las empresas mineras que sean deficitarias el 15 de octubre del año 2014.
Para los asistentes a la fiesta minera de Rodiezmo, y para todo el PSOE, el malo de la película no es otro que Alejo Vidal-Quadras. Respaldado, claro está, por el Partido Popular. Almunia en cambio, y con él toda la tropa del socialismo español, son Hermanitas de la Caridad que no tienen otra preocupación que el bienestar de los ciudadanos españoles. Aunque no lo reconozcan, el verdadero adalid de la postura liquidacionista de la minería es el destacado miembro del PSOE y casualmente comisario de la Competencia, Joaquín Almunia. Fue él quien presentó en Bruselas la nueva propuesta, limitando las ayudas a la actividad extractiva del carbón solamente hasta el 15 de octubre de 2014. Este nuevo reglamento, defendido ardorosamente por Almunia, elimina la posibilidad de que los Estados sigan manteniendo hasta un 15% de su suministro eléctrico con fuentes energéticas autóctonas, como es el carbón.
Lo que es indiscutible que quien de verdad tiene verdadero peso específico en Bruselas para rechazar el decreto de restricciones elaborado por el Gobierno español para regular las ayudas al carbón nacional, es precisamente Joaquín Almunia y no, Alejo Vidal-Quadras. La diferencia entre uno y otro, por el rango que ocupan dentro de la Unión Europea, es evidente y no admite comparación. El comisario de la Competencia tiene cierto poder decisorio, mientras que el eurodiputado del Partido Popular solamente dispone de un voto.
No está demás recordar aquí la claridad y la dureza empleada por Joaquín Almunia al exponer su postura sobre el sector minero. Dijo con toda crudeza que “es una cuestión de justicia que las minas dejen de recibir ayudas cuando hay empresas que funcionan sin subvenciones. Y agregó sin miramientos y sin remilgos que las subvenciones “deben dirigirse de forma creciente a sufragar los costes sociales y ambientales del cierre”. Lo que viene a decir que la Unión Europea está dispuesta a financiar la desaparición del sector minero para así “minimizar el impacto social y económico en los municipios carboneros”. Y esa desaparición definitiva tendría lugar no más allá del 15 de octubre de 2014.
Pero en el PSOE hay maestros para camuflar la verdad y achacar sus propios pecados al primer adversario político que se tercie, en este caso a Alejo Vidal-Quadras por hablar de manera imprudente más de la cuenta y fuera de lugar. El aldeanismo ideológico de los socialistas españoles les lleva continuamente a retorcer los acontecimientos y disfrazarlos como mejor les convenga, cayendo casi siempre en la desvergüenza. Y todo esto, sin el menor remordimiento de conciencia. Hasta ahí podíamos llegar.
Gijón, 6 de septiembre de 2010
José Luis Valladares Fernández
No sabemos cuál hubiera sido el desarrollo de los discursos de haber asistido al evento Rodríguez Zapatero. Su presencia, desde luego, hubiera sido más necesaria que otras veces, para defender ante los mineros los intereses de la industria nacional del carbón que peligra claramente su continuidad, con lo que esto supone para el empleo en la minería. Este año, el blanco prioritario de los discursos fue Alejo Vidal-Quadras por hablar a destiempo de algo que, al parecer, no es de su incumbencia. Todos sabemos que está en el aire un real decreto de nuestro Gobierno para primar el consumo de carbón autóctono en las centrales térmicas españolas. El Ejecutivo comunitarios aplazó hasta después del verano su decisión sobre el plan español de ayudas al carbón.
Es evidente que Vidal-Quadras eligió un mal momento para manifestar públicamente su postura ante el decreto de incentivos al carbón español, pendiente de la aprobación comunitaria. Llegó a pedir a Bruselas que examinara con lupa semejante decreto, sin tener en cuenta que su postura, improcedente o no, dañaría con seguridad las expectativas electorales en las regiones mineras. Como en el PSOE están siempre a la que salta, se olvidaron inmediatamente de sus propias miserias y de que el principal enemigo de las ayudas al carbón no es otro que el conocido socialista Joaquín Almunia, para lanzar todo tipo de diatribas contra Alejo Vidal-Quadras. Los oradores de Rodiezmo procuraron explotar al máximo la iniciativa de éste, para tildar seguidamente al Partido Popular de insolidario, ya que, según ellos, atenta “con sus planteamientos contra la viabilidad económica del sector y de las comarcas mineras”.
Fueron obviadas evidentemente las explicaciones posteriores de Alejo Vidal-Quadras, en las que indicaba que la minería del carbón debe recibir el oportuno apoyo de España, por los miles de empleos que proporciona en las cuencas mineras, pero ratificándose, claro está, en que el camino elegido por el Ejecutivo de Zapatero no era el más adecuado. Es cierto que el Gobierno, las mismas empresas y los sindicatos aún mantienen la esperanza de que la Unión Europea prorrogue el reglamento de ayudas al carbón al menos hasta el año 2020, por tratarse de un sector estratégico necesario para el futuro energético nacional. Pero la intención de Bruselas, defendida inequívocamente por Almunia, es muy clara: liquidar de manera inapelable todas las empresas mineras que sean deficitarias el 15 de octubre del año 2014.
Para los asistentes a la fiesta minera de Rodiezmo, y para todo el PSOE, el malo de la película no es otro que Alejo Vidal-Quadras. Respaldado, claro está, por el Partido Popular. Almunia en cambio, y con él toda la tropa del socialismo español, son Hermanitas de la Caridad que no tienen otra preocupación que el bienestar de los ciudadanos españoles. Aunque no lo reconozcan, el verdadero adalid de la postura liquidacionista de la minería es el destacado miembro del PSOE y casualmente comisario de la Competencia, Joaquín Almunia. Fue él quien presentó en Bruselas la nueva propuesta, limitando las ayudas a la actividad extractiva del carbón solamente hasta el 15 de octubre de 2014. Este nuevo reglamento, defendido ardorosamente por Almunia, elimina la posibilidad de que los Estados sigan manteniendo hasta un 15% de su suministro eléctrico con fuentes energéticas autóctonas, como es el carbón.
Lo que es indiscutible que quien de verdad tiene verdadero peso específico en Bruselas para rechazar el decreto de restricciones elaborado por el Gobierno español para regular las ayudas al carbón nacional, es precisamente Joaquín Almunia y no, Alejo Vidal-Quadras. La diferencia entre uno y otro, por el rango que ocupan dentro de la Unión Europea, es evidente y no admite comparación. El comisario de la Competencia tiene cierto poder decisorio, mientras que el eurodiputado del Partido Popular solamente dispone de un voto.
No está demás recordar aquí la claridad y la dureza empleada por Joaquín Almunia al exponer su postura sobre el sector minero. Dijo con toda crudeza que “es una cuestión de justicia que las minas dejen de recibir ayudas cuando hay empresas que funcionan sin subvenciones. Y agregó sin miramientos y sin remilgos que las subvenciones “deben dirigirse de forma creciente a sufragar los costes sociales y ambientales del cierre”. Lo que viene a decir que la Unión Europea está dispuesta a financiar la desaparición del sector minero para así “minimizar el impacto social y económico en los municipios carboneros”. Y esa desaparición definitiva tendría lugar no más allá del 15 de octubre de 2014.
Pero en el PSOE hay maestros para camuflar la verdad y achacar sus propios pecados al primer adversario político que se tercie, en este caso a Alejo Vidal-Quadras por hablar de manera imprudente más de la cuenta y fuera de lugar. El aldeanismo ideológico de los socialistas españoles les lleva continuamente a retorcer los acontecimientos y disfrazarlos como mejor les convenga, cayendo casi siempre en la desvergüenza. Y todo esto, sin el menor remordimiento de conciencia. Hasta ahí podíamos llegar.
Gijón, 6 de septiembre de 2010
José Luis Valladares Fernández
Todavía no han aprendido que el PSOE es una máquina de vender sartenes usadas, no se dan cuenta de que no todos leen prensa ni ven otro informativo que Tele5.
ResponderEliminarTodavía no entienden que se las ven con maestros de la manipulación.
De todas maneras a mi me gusta Cuadras, aunque tiene que cuidar la oportunidad de sus declaraciones.
Un saludo.
Vidal-Quadras, amiga Candela, es una bella persona. Aveces habla más de la cuenta, porque piensa que todos son honorables personas como es él. Y este no es el caso. Y más tratandose de estos progres del PSOE que andan siempre buscando tres pies al gato.
ResponderEliminarSaludos cordiales
ZP ya opta por no presentarse a según que actos ,sintoma de su poca o ninguna credibilidad y hasta dudas de su propia persona ,y a todo esto seguimos creando parados y más ERE's sin parar ,vamos bien...!
ResponderEliminarMuy buenas a los dos, decía ¿Hemmingway? "Son necesarios dos años para aprender a hablar, 60 para aprender a callar". Pero Quadras a mí también me cae bien, le faltó picardia y casi diría que eso también 'habla' a su favor.
ResponderEliminarLo del carbón, han tenido muuuucho tiempo, durante la bonanza para ir desmantelando sin traumas, poco a poco y recolocando a la gente, pero no. 'Dormirse en los laureles' es otra de las cualidades de zETAp y cia.
Dos abrazos
Ese es problema, querido Jose Luis: que Vidal Quadras no ha aprendido todavía con quien se juega los cuartos, con que clase de gentuza y calaña cohabita.
ResponderEliminarNo se puede ir de caballero entre rufianes, ni usar florete con tipos que gastan navaja albaceteña.
Lo cierto es que la minería del carbón es sucia, carísima y obsoleta, tendrán que buscarles otra salida a estas personas como ha venido sucediendo con no pocas actividades a lo largo de la Historia...ahora bien, comprendiendo lo duro de su situación laboral y familiar, no hay excusa para comportamientos borrokos y coartar las libertades de los demás como se está viendo...y lo de Rodiezmo es un retrato de otro siglo.
ResponderEliminarSaludos Jose Luis.
Así es, amigo @ngel. Zapatero es la cobardía personificada y si huele chamusquina, huye precipitadamente para que nadie ose mancillar su imagen.
ResponderEliminarPor otra parte, pretender que Zapatero nos saque del pozo, es tanto como pedir peras al olmo. Lo único que hará, será hundirnos aún más. Vamos bien ...!, como tu dices, pero sin freno y de bruces al precipicio.
Saludos cordiales
Hola Jose Luis, a Zapatero ya no le quieren ni en su propia tierra! qué triste.. pues como no continúen las ayudas para el sector minero no sé de qué van a vivir comarcas como el Bierzo, yo de este tema no tengo ni idea pero si la cosa no ha cambiado hay miles de personas que trabajan y que mantienen a sus familias trabjando en las minas, no sé dónde las piensan recolocar, dios este hombre no mira ni por su casa, un abrazo José Luis :)
ResponderEliminarDe eso se trata precisamente, amigo Carlos, de tener un poco de malicia. Vidal-Quadras peca de pensar que todos somos buenas personas, todos estamos hechos de la misma pasta. Y esto evidentemente no es así. Hay personas -el PSOE- que están al acecho de lo que digas, para sacarle punta y, su llega el caso, para hacerte decir lo que no has dicho.
ResponderEliminarUn abrazo
Efectivamente, querida Natalia, Alejo es todo un caballero. Siempre lo ha sido. Precisamente por ser una buena persona, se confía demasiado y atribuye equivocadamente a todo el mundo la caballerosidad que él rezuma por todas partes. Precisamente lo que en realidad abunda, no es la caballerosidad, sino la maldad, la envidia y la ruindad. Y si no eres prevenido, al final lo pagas.
ResponderEliminarUn abrazo
Que la minería tenía los días contados, amiga Maribeluca, hace ya mucho tiempo que se sabía. Y no se puede esperar a la víspera del cierre para tomar medidas, que es lo que ha hecho Zapatero. Y esas medidas, por lo que parece, son rechazadas por la Unión Europea. La reconversión minera, creando industrias nuevas para recolocar a los que van cesando en la minería, hace ya tiempo que tenía que haber empezado.
ResponderEliminarPero hay gente, amiga Maribeluca, que piensa que con cantar la Internacional con el puño el alto, es ya bastante,
Saludos cordiales
Que a Zapatero no le quieren ya ni en su propia casa, querida Vir, es evidente. Hoy precisamente ha transcendido la noticia de una ecuesta encargada por José Blanco, a realizar entre miembros del PSOE, y los propios socialistas valoran más a Galladón que a Zapatero.
ResponderEliminarTambien es cierto que no se que va a ser de las cuencas mineras, como el Bierzo en León y Langreo, Mieres y Turón en Asturias. Lo van a tener demasiado crudo
Un abrazo
Esta claro que se ha escaqueado de los abucheos, esigencias y reclamaciones, este cobarde e inutil solo hace una cosa bien, y es hacernos o querer hacernos vivir en sus propias mentiras y manipulaciones. Las minas de carbón hace años que estan desauciadas porque no dan beneficios a este siglo de energias alternativas, lo peor es que se mira para otro lado sin dar soluciones al trabajo minero de la mineria del carbón, como no les interesa hasta que llegue las eleciones ahora boquitas calladas y despues la boca se suelta con palabras y frase de esas que nos tienen a costubrado el pollo este, vamos más patético imposible. Nada amigo José Luis tendremos zp para rato y si no al tiempo.
ResponderEliminarSaludos.
Lo que da de sí Zapatero, amigo E..P.., ya lo sabemos. O es el tonto del pueblo o nos quiere hacer tontos a todos los demás. Lo que si es cierto que en España no cabe un tonto más. Y precisamente por eso tenemos de presidente a un individuo que no valdría para concejal de pueblo.
ResponderEliminarUn abrazo